Miguel López-Quesada, presidente de Dircom, ha inaugurado la jornada recordando la importancia que los valores y las conductas en las compañías son clave para asegurar un ambiente ético y legítimo. “El compromiso de los comunicadores con la Ética debe ser una tarea irrenunciable para nosotros”.
Asimismo, López-Quesada ha asegurado que “la relación entre directivos de Comunicación y periodistas en un entorno disruptivo plantea desafíos éticos a atender de forma conjunta. Por ello, desde Dircom hemos acordado trabajar con FAPE, APIE y la APM en definir las mejores prácticas”.
Por su parte, José Manuel Velasco, miembro del comité ejecutivo y presidente del European Regional Council de la Global Alliance, ha destacado que “la ética forma parte intrínseca del negocio. Un producto y servicio tiene que ser diseñado, producido, vendido, distribuido y posvendido éticamente. Las organizaciones deben hacer las cosas bien, y ese bien incluye éticamente”.
Ángel Alloza, CEO de Corporate Excellence – Centre for Reputation Leadership, ha señalado la importancia que tiene la buena gestión de las organizaciones en la economía de los intangibles. “La confianza no es suficiente, necesitamos generar algo más profundo entre nuestros públicos de interés, como la admiración y el respeto. Si conseguimos eso, que no es otra cosa que una buena reputación, seremos una organización que abra al largo plazo”.
Ángel Alloza, CEO de Corporate Excellence – Centre for Reputation Leadership
Durante su ponencia, Adela Cortina, catedrática de la Universidad de Valencia y directora de la Fundación Étnor, Ética de los negocios y las Organizaciones Empresariales, ha explicado de qué trata la ética: “básicamente de la forja del carácter, de la forma de la excelencia, de las personas y de las organizaciones. Las personas tienen que intentar ser excelentes, y las organizaciones también”, ha indicado.
Asimismo, Cortina ha asegurado que no bastan las leyes, aunque sean completamente necesarias, “hace faltan las actitudes de la gente, de no tener adversarios, sino de tener amigos con los que contribuir a la sociedad. Siempre nos debe acompañar el Ethos. Si nos quedamos sin costumbres, nos quedamos sin democracia”.
La experta en ética empresarial también ha subrayado que una empresa que cumple su responsabilidad social crea cohesión social y riqueza. “Una sociedad en la que hay cohesión social se siente bien tratada, con un buen trabajo, bien pagada, y con ganas de seguir adelante. La ‘responsabilidad’ de las empresas es con toda la sociedad, de generar prosperidad y reducir desigualdades”.
Adela Cortina, catedrática de la Universidad de Valencia y directora de la Fundación Étnor, Ética de los negocios y las Organizaciones Empresariales
Cortina ha concluido su exposición haciendo un alegato en defensa de la palabra. “Desde siempre se han contado bulos y se han intentado desacreditar a aquellos que tenían ideas diferentes. Pero la narrativa que usemos tiene que ser verdadera. Hay que contar las cosas tal y cómo son, tratar de contrastar las informaciones y ser lo más objetivos posibles”.
“Hay que rescatar el poder y el valor de la palabra, y para ello, los profesionales de la comunicación son imprescindibles. Porque la sociedad acaba informándose gracias a los profesionales de la Comunicación”, ha rematado.
La jornada ha terminado con un coloquio moderado por Alberto Estévez, vocal de Ética y Defensa de la verdad de Dircom, en el que se han expuesto diversos temas como los dilemas éticos del greenwashing, la compasión y la empatía animal, sobre cómo el mejor antídoto para los bulos es el profesionalismo, o sobre que empresa, medios e instituciones públicas deben trabajar sinérgicamente para lograr el bien común de la sociedad.
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